Una especie invasora que llega con fuerza
El pasado 12 de mayo de 2025, el Ministerio para la Transición Ecológica publicó en el BOE la inclusión del Avispón Oriental (Vespa orientalis) en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras. Se trata de una medida clave que reconoce oficialmente la peligrosidad de esta especie para la biodiversidad, la agricultura y, especialmente, la apicultura.
El avispón oriental es una especie invasora que, al igual que la Vespa velutina, representa una seria amenaza para las abejas melíferas. Se alimenta de ellas, diezmando las colmenas y reduciendo la producción de miel. Aunque su presencia se ha confirmado principalmente en Andalucía y la Comunidad Valenciana, los expertos advierten que podría extenderse hacia el interior peninsular si no se toman medidas urgentes de contención.
Cambios legales y medidas de control
Con esta inclusión en el catálogo oficial, entran en vigor varias implicaciones legales. A partir de ahora, queda prohibida la posesión, cría, transporte o liberación de ejemplares de esta especie. Además, se activa un protocolo nacional para su control y erradicación, y las comunidades autónomas pueden poner en marcha programas específicos de seguimiento, vigilancia y captura, contando incluso con financiación pública.
Riesgos reales para las colmenas
Las consecuencias para los apicultores pueden ser notables. A corto plazo, se espera un aumento de la presión sobre las colmenas, pérdidas directas de abejas y una caída en la producción de miel. El estrés generado por la presencia del avispón también provoca alteraciones en el comportamiento de las abejas, que pueden dejar de salir a recolectar o replegarse en el interior de la colmena. A medio plazo, podrían establecerse ayudas económicas para compensar daños, así como nuevas exigencias en materia de prevención y notificación.
Qué pueden hacer los apicultores
Desde COAG, recomendamos a los apicultores que extremen la vigilancia durante los meses cálidos, cuando la actividad del avispón es más intensa. Es fundamental saber identificarlo correctamente: se distingue por su cuerpo rojizo, una franja amarilla en el abdomen y alas de tonalidad oscura. Ante cualquier avistamiento, debe notificarse inmediatamente a las autoridades competentes de la comunidad autónoma o utilizar canales como AlertCops o SEPRONA. También se aconseja la instalación de trampas selectivas, siempre con el asesoramiento técnico adecuado.
Una respuesta coordinada para proteger la apicultura
La lucha contra esta nueva amenaza necesita de la implicación de todos. La rápida detección y la actuación coordinada pueden marcar la diferencia para proteger nuestras colmenas, nuestra miel y la viabilidad del sector apícola.